Hace algún tiempo me regalaron seis globos eran de diversos colores, recuerdo que llegaron de sorpresa y me emocioné mucho al recibirlos.No estaba acostumbrada a que me dieran ese tipo de obsequios.
Los primeros días los observaba uno por uno y conforme pasaban los días parecía que ellos mismos se cubrían sus fugas para que no se les escapara el aire, el regalo era perfecto pero yo no me sentía bien...
Cuando me los dieron me los amarré fuertemente a mi brazo derecho, pasaron las semanas y el nudo se fue soltando cada vez estaba más flojo hasta que se me llegó a soltar del todo, antes de que se me fueran los tome rápidamente de mi mano, pero a la que se le había ido el aire era a mí... y tomé la decisión equivocada...mucho tiempo los lloré...ahora sólo suspiro al ver otros semejantes a los que una vez me regalaron...
Pd: y pensar que no volverán...
3 comentarios:
A veces el problema es ese mi querida Sibú, que no son los "globos" los que se desinflan, sino nosotros, los que por una u otra razón perdemos el aire que nos llenaba de vida. Sencillamente se nos acaba el amor, aunque sepamos que globos así no nos volverán a regalar.
Recibe un beso,
Ella.-
Las bombas... la llenan bombas de inflado... te quedan pulmones... Vaya a la tienda Carajo! y compre un paquetico de globos... y juegue carnaval con lo que se acerque... Te entiendo... Lo que se fué no regresa... pero no regresa por es muy dificil salir donde habrá caido el bendito globo cuando se desinfló...
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Fuser.
Piensa que lo que te vació te dejó capaz de ser plena de verdad. Y el aire que te llene esta vez no será parecido, será distinto, ni mejor ni peor. Los regalos están para recibirlos, pero perderlos en el camino es legítimo, porque inevitablemente hay que viajar lo más ligeros. Piensa que tú te puedes regalar algo mucho más valioso: simplemente el regalo más perfecto es ser tú.
un abrazo
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