jueves, 3 de julio de 2008

Sibú y Diwú...


Días y noches completas hablando, días y noches completas extrañando, porque cuatro años y cuatro meses no han sido suficientes, porque hoy me pregunto: ¿Quién sos?
Y es que puedo hablar de fechas, puedo relacionar eventos, pero los reclamos están de más, ya no estamos para eso…
Ciega nunca he sido, sorda y muda siempre…Hablemos claro, ¿de qué se trata esto?
Toda una vida me enseñaron que 2 + 2 = 4. Hoy me dicen que 2+2 =5 ¿Qué loco no?
Todo va cambiando, lo único que no cambia es la historia, porque los mismos años llevo contando el mismo cuento y no! No ha sido un fairy tale, pero ha sido el libro que nunca he querido cerrar y que hoy me parece leo las últimas páginas.

P.D. Y es que la leo y me veo escrita, lo leo y no lo entiendo, porque no siempre se lee igual y el que habla y el que se ve… Son todos personas distintas…

3 comentarios:

Fuser dijo...

Ok... ahora el que se lee en las tuyas soy yo... ¿Paradojas?

A veces 1 + 1 = 2, pero yo siempre me he propuesto que 1 + 1 = 1 + 1 y NO a otra cosa... 1 es 1, 2 es 2, y 4 es 4 y no otra cosa...

Tal vez sea efecto del silencio que se produce al colgar el teléfono lo que me haga decirte esto.

Desde el silencioso bar que hoy no abrió.

Fuser.

Ella dijo...

Siempre me pareció exagerado eso de vivir años anclado en una misma historia, recordando y recordando...Hoy llevo 1 año, 7 meses y 13 días...

Si encuentras primero la solución para dar fin a esa historia interminable, aún en la ausencia, no dejes de avisarme a la brevedad posible.

Recibe un beso,
Ella.-

Celeste dijo...

Hay historias cuyos finales son los principios y comienzan por el final, cuentas que no dan y pare usted de contar. A veces somos y no somos y cuando somos no lo sabemos; otras, sencillamente no sabemos lo que somos pero en ese momento somos más que nunca.

Llega un momento en que te detienen las respuestas y sólo queda la opción de esquivarlas para seguir. De lo contrario, atájalas, respóndelas y devuélvelas. Qué es lo peor que puede suceder? Quizás sólo debas cambiar de rumbo.

Te hablo sin saber.

Beso celeste.